domingo, 31 de octubre de 2021

COMPENDIO Y RESUMEN DEL EVANGELIO

 

La Glosa Dominical de Gérminans

  1
https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhqq47elWyF2Up6KutWkd-S11DK_laIti_z-NVPuD2PZD2VsV2L1BhXNqp16AiPPC8T70fA0keK6h4wAZvKAX6E3CcS2b45MlOk92Jj0Q_dxJVkU906fV52MwjuSBgJEvURm3wk8AfVvj0/s1600/jesustemplo2.jpg
 

 
A vista de pájaro, Jerusalén se alza majestuosa sobre el horizonte: ciudad de rostro triste, doloroso, oscurecido. El Maestro de Nazaret repasa con su mirada aquellos lugares que ha recorrido durante tres años en cumplimiento de su labor de profeta: las tortuosas calles donde ha predicado la Buena Noticia, las plazas donde ha sanado a paralíticos y jorobados, los callejones iluminados de oscuridad donde ha devuelto la vista a los ciegos. La piscina con sus enfermos en espera, el Templo de donde ha expulsado a latigazos a los profanadores, el chaflán donde la mujer encorvada se enderezó resanada y el hombre articuló la mano encogida. Amargos recuerdos. Por un amigo enviado a casa curado, diez, cien enemigos han surgido contra Él. Han maquinado y cocido día tras día la gran venganza. Rostros de fariseos, historias de saduceos, encuentros con sacerdotes, ataques de ira de los doctores de la Ley, miradas encendidas de escribas, de doctos y sabios, fragmentos de humana incomprensión que Jesús cruza en aquella fatigosa subida que tiene atada la imperfección de la tierra de Galilea con la majestuosidad perfecta de las praderas celestes. 
 
https://lh4.googleusercontent.com/cBm20DeoEOc14A0bStPow1OCbVJ8emxCbd5xDJN5YJpZ1rS0nd9FUlqj6yx0UnCebmfU88mb4ltECIdjAvJ6fyvbBqgsH-X2Ltf9E9wYFrlHHWWJ53BeZVSNfhxQ5PaxB2oMWT4j2mNAU65YbgAmores, costumbres, lugares, astucias nuestras y de otros, nostalgias cultivadas, dulces venenos del pensamiento, fragmentos de deseo o de sueño, los hijos, la esposa, los amigos: ¿tomar o dejar? “¿Maestro, cual es el más importante entre los mandamientos de la Ley? -pregunta un doctor soñando encontrar desprevenido a Aquel desconocido tan incómodo-. Lo pregunta en nombre suyo, lo hace en mi lugar, lo pregunta haciéndose eco de una humanidad devastada por el deseo de desnudez y transparencia.  Lo pregunta porque invoca una respuesta. Y aquel Maestro, tan fascinante porque es el custodio de una encantadora extrañeza, te conduce a una locura. Seiscientos trece (613) preceptos impresos en los pergaminos, miles de profecías pintadas en las gargantas resecas de los profetas, cientos de rostros exhaustos que pasan por la memoria, todo resumido en un imperativo: ¡Amarás! ¡Amarás! No: “te aficionarás” “te encariñarás” “te dejarás seducir” “te encandilarás” “acariciarás”, “tendrás predilección por”. ¡No!: ¡Amarás!
 
C:\Users\usuario\Desktop\e05b8b74b15530ee65c153d48e3c6d37.jpg
Conquista esta elegante finura de un Hombre salido de treinta años de embarazoso silencio: no revoluciona el contenido de la Ley, no cancela el grito furibundo de los profetas, no desmantela la tradición milenaria incrustada en los oídos de Israel. 
 
Demasiado fácil para un Hombre como Él, su genialidad va más allá: reorienta las miradas del hombre. Aquel hombre que desde el primer latido de la Creación ha enamorado a Dios celosamente. ¡Y ay del que toque al hombre! Sólo una cosa está permitida: “Amarás al prójimo como a ti mismo”. ¡Elegante su astucia! Como a ti mismo: primero ámate a ti mismo. Vive por ti mismo. ¿Cómo hacerlo?  Viviendo y encontrando el tiempo para abrazar a tus propios hijos, de estar junto a tus amigos, de charlar con tus padres (aunque sea pesado) de dejarte adelantar por la autopista. 

C:\Users\usuario\Desktop\amarse-a-uno-mismo.jpg
Vivir es abandonarse y decir: “Este soy yo. Me gusto. Felicidades”. Vivir es regar las plantas del jardín, acariciar a unos gatitos, pintar una sonrisa mientras se mima a un anciano. Vivir es seguir plantando olivos a los ochenta años con la esperanza de verlos florecer. Cada persona es un abismo y cuando la contemplas por dentro tienes vértigo. Abismo, vértigo, locura: los límites insondables de que está imbuida la criatura humana. “Con todo tu corazón, con toda el alma, con todas tus fuerzas”: estamos viajando al confín de lo humano, pues este Hombre te pide viajar hasta las fronteras del Eterno, rompiendo paralelos y meridianos y sentarte en el umbral del mundo. 
 
Esta noche hazte un regalo. Mírate al espejo y felicítate a ti mismo. Únicamente después estaremos equipados para amar a nuestro prójimo también.

Semana del 1 al 7 de noviembre

 

Dena

Intenciones de las Eucaristías. Durante la semana a las 20:00 horas.

Lunes: Solemnidad de todos los Santos. Primera a las 9:00. A las 17:00, si no llueve, visita a los cementerios. Finalizada la visita por todos los difuntos.

Martes: Misa por todos los difuntos.

Miércoles: No habrá Misa. A las 17:30 sacramento de la penitencia. Especialmente para niños que hayan recibido la primera comunión y jóvenes que se preparan para la confirmación.

Jueves: Comienza la novena de Ánimas. A las 19:45 Rosario, Novena y Misa por todos los difuntos. Durante la novena no hay intenciones particulares, se aplica por todos.

Viernes: Rosario, Novena y Misa.

Sábado: Rosario, Novena y Misa.

Domingo: Primera a las 9:00 por Aurora Insua Camaño, Lolita Camaño y difuntos de la familia, Isabel Martínez Acuña. Segunda a las 12:30 por las intenciones de la Novena.

La aportación de la Parroquia a las Obras Misionales Pontificias (Domund) fue de 411€

 

Villalonga

Intenciones de las Eucaristías. Durante la semana a las 19:00 horas.

Hasta el viernes continuamos con la Novena de Ánimas. A las 18:45 Rosario, Novena y Eucaristía, por todos los difuntos.

Lunes: Misas a las 11:00 y 19:00 horas. Si no llueve después de la Misa de 11:00, haremos la visita a los cementerios.

Jueves: A las 18:00 primer Aniversario de Águeda Fontán Camiña.

Sábado: A las 10:30 Acto General por todos los difuntos. A las 19:00 Misa por Miguel do Novello y difuntos de casa; Juan López Piñeiro y esposa Rosa; Mercedes Afonso Moldes; Manuel; Eladio Soutullo Buezas; Carmen Moldes Carrera; Sevando Cacabelos Domínguez.

Domingo: Primera a las 10:30: Por Divina González Dadín y difuntos de la familia; Pastora Touriño Blanco. Segunda a las 11:30 por la Parroquia.

La aportación de la Parroquia a las Obras Misionales Pontificias (Domund) fue de 381€

domingo, 24 de octubre de 2021

Semana del 25 al 31 de octubre

 


Dena

Intenciones de las Eucaristías. Durante la semana a las 20:00 horas.

Lunes: Por Valentín Padín y Dolores Arosa Méndez. Victoria Padín Camaño, hijos fallecidos y José Cacabelos Gondar.

Martes: Por Robustiano Fariña Dopazo; Delvina Outón Tarelo, Manuel Domínguez Balsa y su hijo Luis.

Miércoles: Por Amparo Ares Regueiro y difuntos de la familia.

Jueves: Por Marcos Vidal Da Silva, difuntos familia Silva e Insua.

Viernes: Por Clotilde García Fariña, esposo, hija y nieta.

Sábado: A las 10:30 primer Aniversario de Avelino Basdedios Padín. A las 20:00 Misa por Carmen Padín Vázquez; José Riveiro Prado, Manuel Padín Martínez y difuntos de la familia; Josefina Arosa Agraso, esposo Manuel y difuntos de la familia.

Domingo: Primera a las 9:00 por la Parroquia. Segunda a las 12:30 por las obligaciones del celebrante.

 

Villalonga

Intenciones de las Eucaristías. Durante la semana a las 19:00 horas.

Lunes: A las 18:00 horas, primer Aniversario de Manuel Castro Blanco.

Martes: Por Ángela Meis Lorenzo; Elena Camiña Torres; Antonio Estévez González; Manuel Souto Torres, esposa Carmen Torres e hijo Moisés. José Manuel Chan, Luis García Vidal, padres y hermanos.

Jueves: Comienza la novena de Ánimas: A las 18:45 Rosario, Novena y Misa por todos los difuntos. Durante la novena no habrá intenciones particulares. Se aplica por todos.

Viernes: A las 18:00 primer Aniversario de Justavina Ferreiro Fernández. A las 18:45 Rosario, Novena y Misa.

Sábado: A las 18:45 Rosario, Novena y Misa.

Domingo: Primera a las 10:30 por Lola de Camiña; Manuel Torres Torres; Ramón García Patiño; Manuel Suárez González. Segunda a las 11:30, Misa de la Novena.

domingo, 17 de octubre de 2021

CADA UNO TIENE QUE SER SERVIDOR DE TODOS

 

 


 

¿Habéis visto jamás un político, un rey o un arzobispo venir a vuestra casa a prepararos la comida, limpiar la casa, llevar a los niños al colegio, ir a hacer la compra? ¡Sin embargo ellos son menos que Dios! Pues Jesús ha lavado los pies a sus discípulos, enjugado las lágrimas, sanado a los enfermos, dado de comer a miles de personas, visitado a ladrones y prostitutas. 

 

¿Y nosotros qué hacemos? Esperamos que siempre sean los demás los que vengan a nosotros, a pedirnos disculpas, a dirimir alguna controversia. Siempre deseamos que los demás nos sirvan, nos reverencien, nos den algo, nos hagan un favor. Y eso es así porque cuando recibimos, estamos mejor predispuestos a considerar la idea de poder hacer nosotros un favor a otro: con la condición de que no nos cueste mucho trabajo, no nos ocupe demasiado tiempo, no nos distraiga de nuestros importantísimos compromisos diarios. Pero sobre todo, que no sea nada de valor superior a lo recibido. 

 

Hoy en día son muy pocos los que dan la propia vida por los demás, que se dedican al prójimo sin pedir nada a cambio. ¿Sabéis cuál es la motivación que empuja a algunos a dar sin recibir? Es aquello que se llama “pasión”, aquella fuerza que te impulsa, te agita, te hace vibrar y te hace llevar a cabo acciones, a veces locuras; pero que están llenas de entusiasmo, de amor y de alegría, sentimientos que satisfacen y que por sí solos te recompensan cualquier sacrificio que debas llevar a cabo. Pasión por el hombre, pasión por la naturaleza, pasión por la ecología y tantas otras motivaciones que brotan desde el hondón del alma, pero que para los que tienen fe se convierten substancialmente en pasión por Dios, amor hacia Aquel que nos ama con todo el corazón. Y cuando hay pasión no necesitamos nada más.

 

https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjTwSQRORQeIrlR9FJgICVdIxHVMfv1jPoDBhwCMcZ485Q1R6EUmSWCH4-THy9-JMr1kXfTfYieU6o8Rek2l5i1bGEISQXU0z9sMF-eWGnkIeMnkJbY7SqLYq9tiSsjroMkHAlYlrRElcIB/s1600/glosa1.jpg


Me doy cuenta a menudo de que a la juventud, ¡precisamente a la juventud!, le falta pasión. Cuando les pregunto lo que les gustaría hacer responden con un lacónico “no lo sé”. Si intentas tomar la iniciativa con propuestas como ir a buscar setas, ir a pescar, hacer una excursión por la montaña, ir a ver a algún compañero enfermo al hospital, encuentras mil excusas o aún peor, acuden pero con la cabeza gacha como si aquello fuese un castigo. Observándoles se ve que no tienen pasión, que no hay nada que les enamore, que no tienen aquella hermosísima locura que te hace amar, correr, reír, hacer el loco; que te hace levantarte a las 4 de la madrugada e ir a dormir a medianoche; que te hace abrazar al pobre, al enfermo, al niño maltratado: porque el dar es por sí mismo un recibir.

 

https://lh3.googleusercontent.com/I9DSzcG5oWqpJpBEdJ6p08himH9BP2lwD3qjvvNtacgDAUanJe4hoqXOYSLDaeWpgpqsftVGWvQ66cp_WWCxz6ulmpHBLKjohfPAPf35y2ootUeTiRwrYmGo3dnpWPasIUVten6zdF6nueKU

A veces escucho felicitaciones por ocuparme de los jóvenes, pero en el fondo no entienden que no se trata de un auténtico sacrificio heroico o un acto de virtud: porque es la pasión la que nos anima, la que nos hace gozar cada vez que hacemos alguna cosa por ellos. 

 

¡Qué tristeza ver a aquellos que no tienen ninguna pasión por el prójimo! ¡Cuántas energías podrían dedicar para crecer, amar, sentirse amados! Pensemos en los que tienen pasión por algún deporte. Es muy chulo levantarse por la mañana para ir a entrenar antes o después de ir al trabajo, al Insti o a la Uni, superando los propios límites. Es hermoso ganar los partidos o carreras y ser aclamados como campeones. Pero todo ello está finalizado en sí mismo.

 

Pensad en los apasionados que tienen la meta en el servicio a los demás, creando un equipo de futbol o de baloncesto con la intención de sacar a los chavales de la calle, transmitiéndoles aquella pasión que les lleva a superar los propios límites, enseñándoles el valor del sacrificio, de la lucha, del esfuerzo para obtener un resultado. 

 

Pasión: cada día falta porque está escondida en cada uno de nosotros tras la cortina de la pereza, del consumismo, del egoísmo. Sacudamos nuestro corazón, hagamos aflorar la pasión que está dentro de nosotros, pasión por algo que valga la pena, y pongámosla al servicio de los demás, al servicio de Dios. 

 

Jesucristo reacciona con viveza ante la amenaza que pesa una vez más sobre la comunidad a causa de la ambición desenfrenada de copar los primeros lugares, de conquistar el poder. Su lección es muy severa, casi solemne. Él propone como compensación una nueva economía social: la de una comunidad sin poder cuya única regla es servir, ofreciendo la propia vida por los hermanos, bebiendo el cáliz hasta la última gota. Y por todos sus miembros, porque todos son hermanos. 

 

A la imagen del jefe que manda se contrapone la del que sirve. Los que van a la cabeza paradójicamente tienen una única misión: servir. Su prototipo es el Mesías, convertido en Hijo del Hombre, siervo de todos los siervos, para rescate de aquellos a los que ofrece lo que tiene, es decir: todo. Él aplica una técnica poco empleada para sanar a la sociedad humana: la homeopatía. La entrega radical de Jesús junto con la nuestra, curarán a toda la humanidad de su esclavitud endémica: el egoísmo y el pecado.  Él ha formulado su proyecto de comunidad, su carta constitucional, a la que todos los participantes deben adherirse: cada uno tiene que ser servidor de todos.

Semana del 18 al 24 de octubre.

 

Dena

Intenciones de las Eucaristías. Durante la semana a las 20:00 horas.

Lunes: Por Sebastiana Pérez Lamelas.

Martes: Por Julián, Lucía y difuntos de la familia.

Miércoles: Por familia Arteaga Gómez de la Vega.

Jueves: Rosario y oración Eucarística.

Viernes: Por Julio, Manuela y difuntos de la familia. A las 20:30 reunión de catequistas.

Sábado: Por los hermanos Torres Sineiro; Lolo Dozo Castro; Modesto Sanmartín, Rosa y Juan Santiago y difuntos de la familia. Colecta a favor de las Misiones. Domund

Domingo: Primera a las 9:00 por Elisa Padín Carballa. Segunda a las 12:30 por la Parroquia. Colecta a favor de las Misiones. Domund

 

Villalonga

Intenciones de las Eucaristías. Durante la semana a las 19:00 horas

Miércoles: Por Albino Estévez Chan y esposa Carmen; Manuel Fernández Fernández; Celia Padín Castro.

Sábado: A las 10:30 primer Aniversario de Francisco Manuel Domínguez Freile. A las 19:00 Misa por Tito Torres Otero; Carmen Salgueiro Torres y esposo Edelmiro da Arnosa, Juan Camiña Lamelas y esposa Carmen da Bruñeira. Colecta a favor de las Misiones. Domund

Domingo: Primera a las 10:30 por Maruja de Caneda y esposo José Salgueiro, Josefa Bouzada Poceiro y Manuel Prieto Tacón; José Martínez Troncoso y su padre José Manuel, da Vichona. Segunda a las 11:30 y catecismo; por la Parroquia. Colecta a favor de las Misiones. Domund.

domingo, 10 de octubre de 2021

DIFÍCIL PERO NO IMPOSIBLE

 

C:\Users\SISTACH\Desktop\1281976839778_f.jpg

 

El evangelio de este domingo, con la bienaventuranza de la pobreza y el peligro anexo del apego a las riquezas, es una voz tan insólita, fuerte y decidida que escuece e induce a reflexionar sobre nuestra fe y también acerca de la adhesión a estos juicios tan contrarios a los del mundo.
Hoy se habla mucho de pobreza y la solidaridad con los desheredados y marginados, por lo que resulta doblemente útil reflexionar sobre la palabra de Cristo que pone en guardia contra un espíritu de pobreza únicamente aparente. En el fragmento del evangelio encontramos tres pequeñas unidades: el episodio del joven rico y poco generoso, las reflexiones de Jesús con los discípulos sobre el problema de la salvación de los ricos, y finalmente la pregunta de Pedro y la consiguiente explicación del Maestro sobre la pobreza del discípulo. 
 
El joven rico puede felizmente afirmar que ha observado la ley: se considera un buen hebreo. Pero aún se encuentra lejos de ser un seguidor de Jesús. Para convertirse en discípulo hace falta ponerse en actitud de seguimiento, comprometer toda la propia vida, alejarse de las seguridades terrenas (que en realidad no son tales) y sobretodo de las riquezas. Sin embargo él no está dispuesto. Marcha triste, mostrando como es de difícil la situación espiritual del hombre apegado a los bienes frente a la llamada del evangelio y el problema de la salvación eterna.
 
Difícil pero no imposible. Dios lo puede todo: también salvar al hombre rico si este se abre a su gracia, acepta el don de la fe y coherentemente se libera, poco a poco, del terrible lastre que a la vez es obstáculo y barrera. La Madre Teresa de Calcuta, apóstol de la India, afirma incluso que es fácil ser pobre, pero con una condición: “Es sencillo para quien quiere imitar a Jesús (…) que sufre en los pobres de hoy. Vivir el evangelio se vuelve simple si tomamos en serio la palabra de Jesús, y si la cogemos por entero”.
 
C:\Users\SISTACH\Desktop\san paquito pobre.png
Finalmente Pedro interviene presentando el ejemplo de los Doce que han dejado todo, acogiendo la palabra de Jesús. Y el Maestro tiene ocasión de explicar los motivos y las ventajas de la pobreza del discípulo: libertad total para seguir a Jesús y anunciar el evangelio siendo verdaderamente solidario con los pobres. Esta pobreza verdadera merece una felicidad (en otras situaciones puede ser un mal, fruto de injusticias o de otras culpas) 
 
C:\Users\SISTACH\Desktop\51.jpg
El premio de esta pobreza del discípulo, subraya aún el Señor, es de naturaleza escatológica; sin embargo aparecerá ya de alguna manera en esta tierra, en la comunidad que ellos realizarán viviendo como con hermanos y hermanas. Así, parece concluir el Señor, quedará patente aquel conocido proverbio según el cual aquellos que en la sociedad parecen ser los primeros serán los últimos, mientras que los discípulos que en su pobreza parecen ser los últimos en este mundo, serán los primeros. Pero que no se engañen: no les faltarán persecuciones porque la realización completa del reino no tiene lugar aquí. 
 
La primera lectura demuestra que el Antiguo Testamento ha sido verdaderamente una preparación al Nuevo. El fragmento del libro de la Sabiduría es una invitación a vivir desapegados de las cosas (riqueza, salud, belleza, etc…) para adherir a la verdadera Sabiduría de Dios, prudencia espiritual y atención a los verdaderos valores. Con el antiguo pueblo hebreo  en el salmo responsorial de la liturgia de este día pedimos la “sabiduría del corazón” que nos vuelve sensibles a la Palabra de Dios, de la que habla el autor de la carta a los Hebreos (segunda lectura) subrayando la eficacia. Esta, escriben los profetas, es como la lluvia que no cae inútilmente y obra para nuestro bien o nuestra ruina. Finalmente la sabiduría del corazón prepara día tras día al hombre para este encuentro (y para el consiguiente juicio y presentación de cuentas) del que nadie puede escapar y que nada puede eludir. 

Semana del 11 al 17 de octubre.

 


Dena

Intenciones de las Eucaristías. Durante la semana a las 20:00 horas.

Lunes: Obligaciones del Celebrante.

Martes: Mucha, Herminia, Elisa y Lola Arosa Méndez.

Miércoles: Por Marcelina Domínguez Varela.

Jueves: Por Elías Torres Vidal y sus padres.

Viernes: Por Rosa Cacabelos Rey, esposo Juan y difuntos de la familia.

Sábado: Por Antonio Prieto Pillado y esposa Luisa. Elvira Camiña Padín.

Domingo: Primera a las 9:00 por la Parroquia. Segunda a las 12:30 por Julián, Lucía y difuntos de la familia. Familia Arteaga Gómez de la Vega.

 

El domingo 17 comienza la catequesis. Los padres sean diligentes en enviar a sus hijos, para que se preparen cristianamente, para ser buenos cristianos y buenas personas. No olviden que los padres son los primeros educadores de la fe de sus hijos.

 

Villalonga

Intenciones de las Eucaristías. Durante la semana a las 19:00 horas.

Martes: Por José Manuel Outón Cacabelos y esposa Encarnación, do Freixo.

Jueves: Por Alfredo Lores Lores e hija María Esther, de Piñeiros.

Sábado: Por Isolina la Asturiana y sus hermanos.

Domingo: Primera a las 10:30 a la Virgen de los Milagros, una devota. José Alberto Cobas e hijos. Manuel Pardo Graña. Remigia Troncoso Piñeiro y esposo Jacinto. Segunda a las 11:30 por la Parroquia.

domingo, 3 de octubre de 2021

LO QUE DIOS HA UNIDO, NO LO SEPARE EL HOMBRE

  C:\Users\FRANSESC\Desktop\Jesus-fariseos-divorcio.jpg


Con el evangelio de este domingo, Jesús continúa la serie de enseñanzas que ofrece a la multitud y a los discípulos sobre varias cuestiones y problemas que pueden presentarse en la vida y en la comunidad cristiana. 
 
La ocasión se le presenta, en este caso, gracias a una pregunta-trampa de los fariseos sobre  si es lícito a un marido repudiar a la propia esposa. Que el repudio fuese admitido comúnmente por la legislación mosaica es cosa conocida. Sin embargo no había consenso en la interpretación de la expresión “si el marido ha encontrado en ella algo vergonzoso” (Deuteronomio 24,1).  Lo discutido pues, versaba sobre qué pudiera ser definido como tal, de manera que el marido escribiese un acta de repudio (acta de divorcio) y entregándosela en mano la echase fuera de casa. Se enfrentaban sobre todo dos famosas escuelas rabínicas: la más rigorista, de Rabbí Shammai, que admitía la licitud del divorcio sólo en caso de adulterio de la mujer; y la más laxista, de Rabbí Hillel, que añadía al primer motivo cualquier otra cosa que pudiese desagradar al marido (p. ej. “que el hombre ya no encontrase nada de hermoso y agradable en ella” o también que la mujer no le cocina de la manera habitual o si se equivoca en el caldo o le quema una vianda. Incluso un defecto de la mujer, aunque fuese involuntario, o el aburrimiento de ver cada día la misma cara. Según otro maestro, el Rabbí Akkiba, una razón suficiente podría ser el haber encontrado una mujer más bella. Pero por lo que sabemos, en aquella época concreta lo que la mayoría seguía era la enseñanza del gran Hallel y de su escuela, de modo que prácticamente no había mujer que pudiera evitar legalmente el acta de repudio.
 
C:\Users\FRANSESC\Desktop\imagesWIYQISPR.jpg
Se dice que los fariseos, como en otras ocasiones, presentan esta pregunta a Jesús para ponerle a prueba, es decir para constatar de qué lado inclina la balanza o quizás incluso para que tome partido ante Herodes, que había repudiado a su primera mujer para casarse con Herodías, hecho fuertemente criticado por Juan Bautista. Si de hecho la ley consentía todo lo dicho, en cambio persistía en Israel una corriente profética que condenaba vivamente el divorcio. Véase Malaquías 2, 15-16: “¿No ha hecho el Señor un ser único, carne animada de vida? Y este ser único, ¿qué busca? Una descendencia divina. Respetad vuestras vidas y no seáis infieles a la esposa de vuestra juventud. Pues el que se divorcia de su mujer porque la odia -dice el Señor, Dios de Israel- cubre de violencia su vestido -dice el Señor todopoderoso-. Respetad vuestras vidas y no seáis infieles”
 
Pero Jesús, como otras tantas veces en las que se le implica en un debate, supera el callejón sin salida del legalismo. No responde directamente a la pregunta, señala que la prescripción del Deuteronomio fue necesaria por la dureza del corazón de los hebreos, expresión clásica del Antiguo Testamento para indicar la insensibilidad de la conciencia, la fragilidad pecadora, la obstinada infidelidad a Dios. “Al principio de la Creación, Dios los creó hombre y mujer…y los dos serán un sola carne…no separe el hombre lo que Dios ha unido”
 
He aquí pues la respuesta de Jesús: Él recupera el proyecto originario del Creador, admirablemente descrito en la primera lectura de este domingo, del libro del Génesis. Para superar la soledad del hombre, el Señor Dios crea un ser diferente a todos los otros, sacado de la carne misma de Adán. Existe pues una nexo profundo entre ambos, que los diferencia tanto del mundo animal como del divino, pero que al mismo tiempo los une en un modo del todo peculiar, de manera tan fuerte que cuando Dios conduce a la mujer al hombre, éste manifiesta un estupor gozoso porque reconoce en ella una parte de sí mismo, de su misma naturaleza, diferente de la de los animales, y en el encuentro nace también la posibilidad de la comunicación. Por vez primera Adán habla. 
 
https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi22tpAWsWovOkCXn600P-8HsI1-ovN6C2wZvRGOw_ms8o0UANsSp-LocCjqlplmhJMPz4foHpJVhYIxRBOLJI3wbfxvT1YAybMDT8BBpNGNmwqDJ-QRwTQK-USsKymQQtowSvUzCxl6a8V/s320/SagradaF.jpg
“Por ello –prosigue el texto del Génesis citado por Jesús- el hombre abandonará a su padre y a su madre y se unirá a su mujer y serán los dos una sola carne”. Subrayemos que los dos verbos hebraicos usados para indicar la unión entre el hombre y la mujer no significan únicamente la unión sexual, sino mucho más: hablan de una adhesión a la persona plena, en una relación de amistad y solidaridad: es la reciproca donación total, hasta formar una sola cosa, una sola persona, una unidad que no se extinguirá ni con la muerte, porque “el amor es más fuerte que la muerte” (Cant. 8,6)
 
Jesucristo en su respuesta había citado también el Génesis 1,27 (Dios creó al hombre a su imagen, hombre y mujer los creó) es decir que la pareja humana en cuanto tal es imagen de Dios, y en su naturaleza expresa incluso aquella realidad de la alianza que es el don más grande hecho por Dios a los hombres. La voluntad creadora de Dios a la que Jesús se refiere es crear al hombre a su imagen como varón y mujer, y fundar por tanto la unidad indisoluble del matrimonio: “Así pues, no separe el hombre lo que Dios ha unido”
 
Esta es la visión del matrimonio que la comunidad de los orígenes había deducido de la enseñanza del Señor y que la diferenciaba netamente del judaísmo. Esta es la doctrina que la Iglesia posteriormente siempre ha anunciado. Es natural que nos preguntemos como volverla a proponer hoy, en una sociedad en la que en las últimas décadas tanto los divorcios como las separaciones han aumentado vertiginosamente. Y donde apenas un 10% de los europeos han declarado estar de acuerdo con las enseñanzas de San Juan Pablo II sobre la negatividad del divorcio.
 
Una respuesta la podemos encontrar en la misma página evangélica. Notemos que la enseñanza sobre el matrimonio, Jesús no la imparte ni en la primera predicación en Galilea ni en medio de las controversias con los fariseos, sino únicamente a partir del momento en el que Él es reconocido como Mesías, como Hijo del Hombre llamado a una entrega de sí mismo hasta la cruz. Esto es como decir que esta enseñanza se inserta en la global propuesta de la vida cristiana, que implica dificultades, sufrimientos y “cruces”. En el caso específico de los cónyuges, éstas consisten en el esfuerzo constante por encontrar vías de entendimiento, comprensión y disponibilidad del uno hacia el otro; volver a empezar cada vez que algo se tuerce o incluso se rompe. 
 
Pero Cristo continuamente ha prometido permanecer junto a nosotros, con su gracia y con el don de su Espíritu. Jesús hizo su primer milagro en Caná para salvar la felicidad de aquellos esposos. Cambió el agua en vino y al final  estuvieron de acuerdo en afirmar que el vino servido por último era el mejor. Jesús hoy está dispuesto, si es invitado a la boda, a obrar de nuevo este milagro y a hacer que el vino último -el amor y la unidad de los años de la madurez y la ancianidad- sea aún mejor que el de la primera hora. 

ENTRADAS QUE PUEDEN INTERESARTE