domingo, 25 de diciembre de 2022

YA TIENEN FAMILIA Y ES SAGRADA

 


Ella lo mira, él lo mira, ellos lo miran: «¡Oh Señor, Dios mío!» Sobre los hombros la expresión pobre de los pobres, la gramática de lo casi banal, el incontenible asombro para una belleza insostenible. Ellos lo miran, Él los mira: es poco más que un cachito de carne gritando al frío pero en sus ojos esconde algo fascinante: su forma infantil, como todos los niños, traiciona la sospecha de un misterio allí escondido. La mirada de José se fija en pequeñísimos particulares, casi minucias frente al Cielo. El vientre de María que suavemente se desinfla, aquellas manos de mujer que tiemblan delicadas, aquel golpe de ceja confuso entre maternidad y confianza. La indisciplina del Niño: los piececitos que se agitan, los gemidos musicales de la vida, aquella mirada divina dentro de un ojo de recién nacido. «Cógelo en brazos, José» –le susurra María. El carpintero está estupefacto, anonadado con la idea de poder/deber tocar a Dios: «mi Dios» – le deja resbalar con los labios un beso y se lo estrecha al corazón. Un poco más allá – bajo una guirnalda de murciélagos apiñados, parapeto contra el frio viento de Judea, María busca trapos para hacer pañales: hay que vestir a Dios antes de depositarlo sobre el heno de los humildes. Entre las manos, ropa de lino y gasas: los calienta al fuego y envuelve aquel Misterio que reposa en los brazos seguros de aquel carpintero de noble sangre.

Le tocan, le abrazan, le rodean: verdaderamente es un Dios increíble. Pensándolo bien era una locura. Al tocarle se franquea el límite entre lo decible y lo indecible. Es un Dios embarazoso: «¿Dónde lo colocamos ahora?» –es la primera preocupación de María. Hay madera y José se da cuenta, es su material: su manto sobre su material y el primer lecho del Salvador está listo.


Imaginar a Cristo es obra de artistas y genios: poca pintura y paleta de garabatos. Ver a Dios y soñar lo inimaginable: la audacia de aquel Rostro atormenta a las noches oscuras y agita las almas tempestuosas. Imaginar y ver: pero tocar a Dios es como un acelerón en el corazón. Porque un Dios que se deja tocar y besar, mimar y cambiar los pañales, abrazar mientras menea los bracitos, no es un Dios estándar: es un Dios de rubor en las mejillas blanqueadas por la espera. Un Dios sorprendente que se ha hecho esperar por mucho tiempo para acrecentar los deseos del hombre. Una doble cuenta atrás. Nuestra cuenta atrás: mientras se aproxima la alegría - aunque sólo sea un pequeño fragmento- el hombre inicia su cuenta atrás. Es el tiempo preñado de miedo y agitación, de ansia y de esperanza, de emociones e improvisaciones. Su cuenta atrás en cambio es: aún un poco y estaré en medio de ellos, aún un día y los conquistaré, aún una Navidad para todos. En toda cuenta atrás hay nostalgia de un espacio, de un tiempo, de una casa: estar exiliado no es estar lejos de casa sino haber perdido la añoranza de tener una casa. La casa de Dios: aquel vientre virginal de Mujer, aquella inexplicable confianza de José, aquel atrevido y valiente sueño de Dios: «Dios se hizo carne y habitó entre nosotros» Se ha hecho hombre y se ha dado un apodo, como las familias de los hombres de aquí abajo: Emmanuel que significa «Dios con nosotros». Pan y luna, pañales y estaciones, gemidos y silencios, encuentros y desencuentros. Cielo y desesperación: hay algo inexplicable en aquella mirada atónita y divina circundada por aquellos dos, agachados sobre la cuna para contemplar aquella carita grande como el puño de un hombre. Para contemplar a Dios, surgido de una anónima historia de amor de periferia. De Nazaret.

Hace olor a rebaño cerca del establo: mientras tanto la historia se mueve. Hay música de gaitas y dulzainas ya cercanas. Es el frenesí de la fiesta alrededor: una estrella eclipsada por su cometa ha traicionado la presencia de la Presencia. Dentro de poco José abrirá la puerta: la cuenta atrás habrá también terminado para ellos, para los de fuera. Quién sabe qué dirán: quizá se lo esperaban diferente, más robusto, más rubio…

Paciencia, quizás es justo que sea así. Que al mundo no lo salvase el aburrido y previsible poder, sino la ingenua fragilidad de un niño. Abren la puerta: sólo luz y silencio. Las palabras tropiezan.

Semana del 26 al 1 de enero

 

Dena

Intenciones de las Eucaristías. Durante la semana a las 20:00 horas.

Lunes: Por Maruja Durán Fernández. José Casal, esposa Lola, hija y sobrino Tucho.

Martes: Por José Manuel Moldes Lores y sus padres. José Argibay Valladares y esposa.

Miércoles: Por Esther Pérez García. Pastora Pombo Padín, padres y hermano.

Jueves: Por Dolores Padín Camaño, esposo Cayetano y yerno Vicente.

Viernes: Por Manuel Torres Touriño, esposa e hijo Elías.

Sábado: Misa a las 19:00 por Paco Cacabelos Vidal, Carmen Zamar Rodríguez, Maruja Cacabelos Vidal, Clotilde Casal Rey y esposo Avelino, Antonio Bouzada Poceiro y esposa Pastora.

Domingo: Misa a las 12:30 por Manuel, esposo Julio, hijos y difuntos de la familia.

 

Villalonga

Intenciones de las Eucaristías. Durante la semana a las 19:00 horas.

Jueves: A las 18:00 primer Aniversario de Cándido Carballa. A las 19:00 Misa por Rosa Torres Bouzada y esposo José Antonio Outón, de Piñeiros; Alfonso Rey Carballa, esposa Dorinda, hijos Arturo y Celso; Raul Chichi y a todos los Santos, una devota.

Sábado: Misa a las 18:00 a San Roque a intención de una devota.

Domingo: Misa a las 11:00 a la Virgen del Carmen a intención de Esther de Piñeiros. Manuel Pardo Graña.

domingo, 18 de diciembre de 2022

Ellos tres: un trío atrevido

 



 
Tres troncos de madera y serrín aún en el cepillo, la melodía de una vieja nana: para hacer la mesa se necesita madera, para hacer madera es necesario el árbol, para el árbol se necesita la semilla, para la semilla el fruto, para dar fruto es necesaria la flor. En resumidas cuentas, para hacer una mesa se necesita una flor: y la flor es símbolo de belleza. 
 
Estamos en Nazaret, las primeras luces del alba en la carpintería de José: sangre noble, oficio humilde, corazón enamorado. La descendencia le imponía una memoria: “He aquí que la Virgen concebirá y dará a luz un hijo: se llamará Emmanuel, que significa Dios con nosotros” ¿Quién sabe qué rostro tendrá la Virgen?: desde hace siglos ha sido motivo recurrente en el pensamiento, en la imaginación y en la espera profética. Él está enamorado, loco por aquella joven silenciosa y trabajadora: ningún eco de su hermoso nombre en la aldea, ningún signo que trasparentase el misterio de una belleza celosamente guardada. Ella se llama María, él se llama José: juntos se llaman con las sílabas pobres del amor noble. 
 
 
Él y ella. Más el Otro. ¿Traición? ¿Vergüenza? ¿Sospecha? De todo esto hay poco en el corazón de José. Aquella doncella era su sueño, en su dulce belleza había colocado sus ilusiones, en el candor de aquella mirada había depositado su corazón. Y desde la penumbra de su taller adivinaba los trazos, escrutaba la expresión, seguía los pasos de su pequeña “hada”. Quién sabe cuántas veces, dentro de aquel taller lleno de virutas oliendo a viejos barnices, habrá derramado lágrimas aprendiendo las estrofas de un viejo libro que le fue regalado por su padre, también carpintero: “Levántate, amiga mía, mi hermosa y ven. Muéstrame tu rostro, hazme sentir tu voz, porque tu voz es suave y tu faz agraciada” José trabaja la madera y trabajando la madera trabaja el corazón de su amada. Bajo aquel sol de Galilea, María le ha cruzado la mirada, lo ha acariciado y le ha derramado en poesía su amor. Sólo él, humildísimo soñador, podía entender ese lenguaje. Le habló de su Dios, de un ángel del Señor, de un misterio de milenios lejanos, de un sueño escondido en la genialidad del Creador. Y él, protagonista inesperado de una historia escandalosa, acarició aquel rostro agraciado pintando un beso sobre los labios de una mujer, sobre aquel rostro fascinante, sobre aquella melodía lejana. Pero el amor tiene un precio y José pronto lo intuye. María pide salir de su vida, decirle adiós, ser borrada de sus sueños. Ella, en su seno perfumado de eternidad, custodia a un Hijo y José no lo sabe. Ni siquiera lo quiere saber. Ningún hombre podría aceptar a otro entre él y la mujer amada. Y viceversa. “Adiós, María. Y buena suerte”.
 
 
José se sienta en la rebotica con la cabeza entre las manos y siente que el entusiasmo se desvanece, que germinan las dudas, que planea la tristeza. Amenaza lo imposible, medita lo que hacer, proyecta una solución: la repudiará en secreto. Aunque con el gusanillo de la traición. José no echa a perder su señorío dinástico y a pesar de renunciar a abrazar a aquella joven, nadie podrá alardear de verla burlada y ridiculizada. La repudiará en secreto: con discreción, como un triste adiós, con el toque tierno de quien conservará para siempre su agradable recuerdo. No sabe, José, que Dios también ha tejido para él una melodía. En el drama de aquel temor, él, tallista en un taller ridiculizado por el vecindario, consciente de su pequeñez, es saludado por un ángel con respeto: “José, hijo de David, no temas”. Es el intermedio de un sueño: las visiones son siempre pequeñas visiones, los signos siempre pequeños signos. Dios volverá a cada encrucijada para decirte: “No temas haberte perdido. El camino es el bueno” 
 
José sonríe: María le ha sido fiel, nada de ajeno o extraño en su corazón. Sólo Dios por medio: embarazoso, osado, ardiente. En el evangelio de José no se custodia sílaba alguna. Sólo su grandeza, más allá de su Mujer. Ella se ha fiado del Todopoderoso, él ha apostado todo a la fragilidad de una criatura. Su criatura. Aquella por la que comprometerse del todo era la más hermosa declaración de amor. Aquella de la que nacerá el Cristo, llamado Mesías

Semana del 19 al 25 de diciembre.

 

Dena

Intenciones de las Eucaristías. Durante la semana a las 20:00 horas.

Lunes: Por Modesto Lobato Outón; Benjamín Castro Minguillo y difuntos de la familia.

Martes: Por María Esther Soutullo Limeres. Manuel García Conde.

Miércoles: A Santa Lucía, Dantis.

Jueves: A Santa Lucía, Dantis.

Viernes: Por Lucía, Benito, Peregrina y difuntos de la familia. Carmen Padín Vázquez.

Sábado: Día de Nochebuena. Misa a las 18:00, válida para el día de Navidad. Por los Participantes.

Domingo: Natividad de Nuestro Señor Jesucristo. Misa a las 12:30 por Enrique, abuelos y difuntos de la familia.

 

Villalonga

Intenciones de las Eucaristías. Durante la semana a las 19:00 horas.

Martes: Por Pastora Camiña Torres, Pastora Padín Camaño; Elena Divina Camiña Torres y esposo Juan Piñeiro Tarelo; Jorge Fandiño Camiña, Padre y difuntos de la familia, Eugenia Nores Dominguez.

Miércoles: A las 13:00 Misa en Gondar.

Jueves: A las 13:00 Misa en Gondar.

Sábado: Si no hay difunto, Misa a las 17:00, válida para el día de Navidad; por los participantes.

Domingo: Misa a las 11:00 por Elisa Martínez Torres y sus padres, Carmen García Méndez, de Rouxique.

Hasta el domingo siguiente a los Reyes, solo habrá Misa a las 11:00.

domingo, 11 de diciembre de 2022

La cruz y la bandeja: Amigos codo a codo

 




Es el spot más sublime sobre el tema de la amistad. Firmado por dos amigos de toda la vida, primos por parte de madre y gemelos por los sueños del corazón. Y sin embargo uno, el Bautista conocido como Juan, tuvo un maltratado inicio: los números del cielo le son adversos. Porque si hubiera querido hacer carrera entre los profetas, hubiese nacido demasiado tarde: sobre Zacarías ha recaído el peso y el honor de ser el último entre los voceros del Antiguo Testamento. Si hubiera querido hacer carrera entre los apóstoles, hubiese nacido demasiado pronto: los primeros pescadores de Tiberíades -sobre los cuales recaerá el título de primeros entre los discípulos de Cristo- estaban aún aprendiendo los secretos de su oficio de sus ancianos padres. En resumen: demasiado pronto o demasiado tarde. La del Bautista estaba llamada a ser una historia de fracaso. Dos contratiempos para otras dos tentaciones. La primera: la de considerarse un desgraciado leyendo las constelaciones, porque nacer bajo una buena o mala estrella es la disyuntiva para quien decide organizarse la existencia. También él, aunque pariente de un Primo tan esperado como imprevisto, quizá hubiera podido mirarse al espejo y decir: «estoy demasiado cansado y confundido. Nadie me comprende. Nadie me quiere. Todos están contra mí. Nada me sale bien. Él sí que es inteligente. Ella sí que es bella. No soy capaz. Ni lo intento. No lo conseguiré nunca. Total, no servirá para nada. Después de todo: ¿Qué dirá la gente? ¡Ay si tuviera, ay si fuera…!

Si hubiese reaccionado de esa manera, ¿dónde hubiera acabado el evangelio? ¿Y él? Quizás hubiera acabado en la portada de cualquier revista del corazón. En cambio vivió el silencio atrevido del desierto: cosas para gentes de corazón, de hígado duro, de ardiente pasión.


Pasada la primera tentación vino la segunda. La que hubiera podido lanzarlo hacia el Olimpo de los gigantes. Total, para la galería era él el Mesías: carisma, atractivo, inspiración poética y mirada de profeta, corteza de duro y encanto de noble. Conquistador de corazones, mago del alma, insobornable como hombre. Podía cambiar la historia a su favor, atribuirse todos los aplausos, robar la escena al Primo. Todos le hubieran creído. En cambio él, profeta de la amistad, aleja a todos de él y los une a Cristo: «He aquí el Cordero de Dios». Y mientras todos huyen de él -parece que en todo tiempo y lugar a la gente le guste subirse al carro vencedor- su corazón está alegre porque se ha realizado como hombre: él tenía que preparar el encuentro. El Otro tenía que pasar por delante e invitar a los demás al seguimiento. Dos tentaciones superadas y el Bautista, el hombre de los tiempos equivocados, se convierte en el hombre justo en el tiempo puntualísimo, aquel que está grávido de salvación. Es el Primo quien se saca el sombrero frente a aquel gesto. «¿Qué habéis salido a ver, un profeta? Sí y os digo, más que un profeta.» No hay un reconocimiento más hermoso en toda la Escritura: Jesucristo recoge el manto del amigo Bautista y lo exalta porque más que la forma ha guardado la sustancia. Ha preferido la humildad al obsequio fácil. La simplicidad a la diplomacia. Una cabeza cortada al silencio mezquino. Uno ha preparado, el Otro ha cosechado. Ambos sin celo y sin recelo alguno entre las gestas de sus corazones.

Al Bautista le tocó allanar el camino, ser la voz de la Otra Voz, cargarse a hombros aquella gente que lo creía el Cristo. Le ha tocado en suerte dejar la cabeza como prenda, cabeza que caerá macabra y oscura en la bandeja de una apuesta. Al Primo le ha correspondido el resto: sobre los mismos caminos unirá el Cielo con la Tierra, narrará lo inaudito de un Dios festivo, ensanchará los horizontes de casa de la gente de Palestina. El depósito del primo (jamás restituido) fue la cabeza. El suyo, el cuerpo entero. Al Bautista una bandeja, a Él una Cruz. En medio el sabor de una amistad amable y sin celos. Dos historias que han cambiado el mundo. Apreciándose y respetándose.

Semana del 12 al 18 de diciembre.

 

Dena

Intenciones de las Eucaristías. Durante la semana a las 20:00 horas.

Lunes: Por Nélida Blanco Dopazo.

Martes: Festividad de Santa Lucia. Horario de Misas: 8:00, 9:00, 10:00, 11:00, 12:00 y 13:00 Misa Solemne. Por la tarde a las 18:00 y 19:00. Todas por las intenciones de los participantes.

Miércoles: Festividad de Santa Eulalia. Misas a las 9:30 y a las 20:00 solemne.

Jueves: Por las obligaciones del celebrante. A las 20:30 reunión de catequistas.

Viernes: No habrá Misa.

Sábado: Por los participantes.

Domingo: Primera a las 9:00 por la Parroquia. Segunda a las 12:30 por Etelvino Dopazo Lores; María del Carmen López González y esposo.

 

Villalonga

Intenciones de las Eucaristías. Durante la semana a las 19:00 horas.

Lunes: A las 18:00 primer Aniversario de María Lucinda Suárez González.

Jueves: Por María Victoria González Outón; Inocente Otero Fernández, esposa Elisa, hijos: Manuel, José, Juan y Pedro.

Viernes: A las 18:00 primer Aniversario de Manuel Muñiz.

Sábado: A las 10:30 primer Aniversario de José Oubiña Radío. A las 19:00 Misa por Julio César Estévez Dadín y sus padres; Antonio Pérez Otero, su padre José Manuel y difuntos de la familia. A Santa Lucía, una devota.

Domingo: Primera a las 10:30 por Manuel Salgueiro Álvarez y difuntos de la familia; Manuel Camiña Fernández; Benita Torres Bouzada, esposo Manuel Souto, hijos: Maruja, Samuel y difuntos. Casa Bouzada de Piñeiros. Segunda a las 11:30 por la Parroquia.

lunes, 5 de diciembre de 2022

¡Floreza la justicia y abunde la paz eternamente!

 




El título de la glosa de este II Domingo de Adviento es calco de la invocación que hoy la liturgia nos hace repetir como respuesta al salmo. ¿Qué espera el hombre de la venida del Salvador? Sobre todo una sociedad a imagen de la que nos viene presentada por el fragmento del profeta Isaías en la primera lectura (Is.11,1-10) Aquí tanto las exigencias de la colectividad como las de los individuos en particular, se realizan en torno a la paz que es consecuencia y fruto de la justicia. Para obtener este objetivo nos ayuda la enseñanza de San Pablo que escribiendo a los Romanos (15,4-9) exhorta a acogerse mutuamente como Cristo nos acoge a cada uno de nosotros. Pero no puede darse una acogida cordial sin una esperanza eterna, fruto de la Palabra de Dios meditada, fuente de todo consuelo.

San Juan Bautista en su predicación, austera pero sincera, anuncia la esperanza que se engendra por la conversión del corazón. Verdadera porque realmente el corazón del hombre es asaltado por tantísimas pasiones egoístas y orgullosas que lo llevan a creerse autónomo, suficiente a sí mismo sin ninguna necesidad de salvación. Para estos superhombres de todos los tiempos, el Bautista tiene palabras terribles y fuertes apelativos: «Raza de víboras. ¿Quién os ha enseñado a escapar del castigo inminente?» Palabras inusitadas en la predicación de nuestros tiempos, pero que tienen todo su peso en un mundo hostil o indiferente a los problemas de la fe. El progreso de las ciencias ha llevado al hombre en su estúpido orgullo a creerse dueño, amo y señor del mundo y a prescindir por tanto de Dios y de todas las normas de honestidad por Él dictadas.

Podríamos exclamar con San Pablo: «mientras descubren las maravillas de lo creado, olvidan a su Creador». Si esto era reprobable en tiempos paganos, es absolutamente carente de sentido y propio de idiotas después de dos mil años de cristianismo, especialmente por parte de aquellos que han recibido el sello bautismal con el don del Espíritu Santo. La espera de la Navidad sea como un timbre de alarma, una señal de activación para cuantos duermen el sueño de la indiferencia o de la hostilidad en relación con la fe. La misericordia del Señor es más grande que la obstinación del hombre y siempre dispuesta a la acogida.


El próximo jueves es la fiesta de la Inmaculada. En Adviento las dos figuras, la de la Virgen y la del Bautista nos enseñan la actitud de quien espera. Navidad llega con prisa y corremos el riesgo de no prepararnos de verdad, de no abrir los corazones con confianza en Dios. Riesgo real y siempre actual, aún más evidente en estos tiempos de profunda crisis cuando la esperanza parece extinguirse día tras día. Basta mirar las noticias para desanimarnos: lucha política intestina, crisis en muchos sectores económicos aún sin resolver, oscuros horizontes en el panorama internacional. Por eso necesitamos levantar la mirada más allá de lo concreto, tener la valentía de creer. Creer es el único gesto que nos ayuda a permanecer anclados en la vida y a no huir. Necesitamos hombres y mujeres que sean signos claros de esa fecunda esperanza.

María, la joven doncella de Nazaret, nos enseña a permanecer en la fe, día tras día. María nos invita a estar preparados porque Dios viene cuando menos te lo esperas, incluso a un rincón perdido como Nazaret. Para nacer en nosotros, Cristo pide un corazón puro, transparente y disponible como el de su Madre. Un corazón que sepa reconocer a los ángeles y las anunciaciones que recibimos cotidianamente. María se convierte en la «ianua coeli», la puerta del cielo que permite a Dios entrar en la Historia. Si abrimos nuestro corazón como la Virgen Inmaculada, también nosotros podremos convertirnos en instrumentos de Dios.

Digámoslo a todos, amigos: Dios ha venido y está a nuestro alcance. Lo podemos conocer. Está presente. Y es evidente y obvio.

domingo, 4 de diciembre de 2022

Semana del 5 al 11 de diciembre

 

Dena

Intenciones de las Eucaristías. Durante la semana a las 20:00 horas. Continuamos con la Novena a la Inmaculada Concepción de la Virgen María. Sobre las 19:45 Rosario, Novena y Eucaristía.

Lunes: Por la Sra. Lola de Varela; José Antonio Méndez Vázquez.

Martes: Por Amancio Gondar Barreiro.

Miércoles: Por Manolo García Barreiro y difuntos de la familia.

Jueves: Solemnidad de la Inmaculada Concepción de la Virgen María. Primera a las 9:00 por las hijas de María fallecidas. Segunda a las 12:30 por Nacho Gallizo Villarreal.

Viernes: A las 17:00 primer Aniversario de Dionisio Castro Minguillo.

Sábado: Por Victoria Pérez Rial. José Salgueiro y difuntos de la familia.

Domingo: Primera a las 9:00 por la Parroquia. Segunda a las 12:30 por las obligaciones del Celebrante.

El sábado, Domingo y lunes tendremos un triduo a Santa Lucía y a Santa Eulalia.

 

Villalonga

Intenciones de las Eucaristías. Durante la semana a las 19:00 horas.

Martes: Por Paco González Méndez, da Arnosa; Luisa González Míguez y esposo, da Salgueira.

Jueves: Misa a las 11:00. Fiesta de la Inmaculada Concepción de la Virgen María. Por María Parisina Otero y esposo Serafín Torres y difuntos de la familia. Carmen Rodríguez Oubeira; Valentina Leiro Méndez; Juan Pita, esposa Gloria y nuera Lola.

Sábado: Por Eladio Dadín Dopazo; a todos los Santos, una devota, Alfredo Lores e hija María Esther.

Domingo: Primera a las 10:30 por Claudia Camiña y esposo Manuel Pita, da Salgueira; Pastora Touriño Blanco y esposo; Juan Torres Dopazo y difuntos de la familia. Segunda a las 11:30 por la Parroquia.

domingo, 27 de noviembre de 2022

¡NO SE DIERON CUENTA DE NADA!



Jesús el Señor en el evangelio de hoy menciona un pasaje bíblico; recuerda los tiempos de Noé en los que todos vivían en la superficialidad: comían, bebían, se casaban, engendraban hijos, pero no se daban cuenta de nada. Todos vivían en la falsedad, todos decían mentiras, todos procuraban no darse cuenta de lo que pasaba cerrando los ojos, porque abrirlos hubiese significado cambiar. Porque si tú ves una cosa ya no eres el mismo: lo sabes, te fastidia haberlo visto; te corroe tanto que, como muchos dicen, era mejor no saberlo. Abrir los ojos es doloroso. Muchos prefieren vivir eludiendo descubrir la realidad. Prefieren engañarse. Y esto nos descubre cuánta falsedad reina en muchas vidas. De la misma manera, cuando Dios vendrá muchos no se darán cuenta. Serán engullidos por la vida y se lamentarán de la desventura y del destino terrible al que se dirigirán. Fue necesario haberse dado cuenta antes, pero dormían y vegetaban. Y llegó la sorpresa…«Estad atentos y mirad alrededor»: se nos dice que hay libertad de pensamiento, de acción, de expresión, libre mercado, libertad de información, que vivimos en una sociedad liberal. ¿Estáis convencidos?Un cierto doctor Ryke Geerd Hamer fue encarcelado hace unos años porque sus descubrimientos ponían en duda la medicina tradicional. Muchos reporteros freelancers que envían contra-informes sobre lo que pasa en Oriente Medio han sido espiados, perseguidos e incluso encarcelados por su tarea informativa acusados de ser alborotadores. Hace unos 20 años procesaron al doctor Hans Urich Hertel por afirmar, tras unos estudios minuciosos, que el horno microondas puede desarrollar células cancerígenas. Sin embargo parece que tenía razón. Pero como a nosotros el microondas nos es tan cómodo, pasamos de todo…


No había armas químicas en Irán. Bush había sido amigo de Bin Laden. Sabemos que la estrategia del terror y el estado de alerta terrorista, engrosa las ganancias de las multinacionales de las armas y los holdings de defensa y seguridad. ¿Y qué más da?

Pues atento, no venga el diluvio y te engulla. La gente cree en todo y lo digiere todo. ¡No os dejéis engañar! A una señora le dicen: «La operación a su marido ha tenido éxito, pero su marido no la ha superado» ¿Ha tenido éxito? Nuestros países van mal porque las leyes no se aplican: hace falta más control, más policía, más radares en las carreteras. ¿Es cuestión de aplicar las leyes o de cambiar nuestra manera de vivir? La indignación de los jóvenes ¿es debida a esta sociedad o al hecho de que tienen de todo? Y me pregunto: ¿Qué personas componen esta sociedad? ¿Es ésta una sociedad de progreso o una sociedad de la economía? ¿No vemos acaso que trabajamos sólo para gastar? Nuestro sueldo nos sirve sólo para llegar a fin de mes, si es que llegamos, porque las necesidades que nos creamos son cada vez mayores. ¿No es ésta una esclavitud? Trabajar únicamente para consumir. Estad atentos a las mentiras. Sucedió en tiempos de Noé. Sucedió en tiempos de Jesús. Sucede también ahora: la gente no se daba cuenta de nada.


Estás casado hace veintitantos años. Al principio había diálogo y comunicación. Había intimidad y atención a lo que el otro sentía y vivía. Ahora todo se ha debilitado. El trabajo, las responsabilidades, las prisas, los hijos: tantas cosas os alejan. En realidad cuando se habla, uno se queda siempre en lo superficial y se habla sólo de las cosas que hay que hacer. Uno no se abre, no cuenta ya nada, no hay tiempo ni para la intimidad ni para escucharse o para decirse cómo uno quiere al otro. La señal está clara: el ladrón llegará pronto. Lo sabes, ponte en vela y está atento. Si no haces nada, si no cambias de ruta, una mañana tu mujer será una extraña y encontrará a otro que la escuche o quizás os adaptaréis el uno al otro con apatía. Diréis: ¿cómo ha sido posible? Pues fingíais que no pasaba nada y no querías bajar de la nube. A tu hijo le han diagnosticado un trastorno de hiperactividad (TDAH) en el colegio. Los síntomas son claros: ¿qué es lo que lo agita en el interior que es más fuerte que él y no consigue controlar? ¿O cuál es el grado de represión que empleáis el colegio y los padres para no sentiros desbordados por esa hiperactividad? ¿Habéis recurrido ya a la medicación? No habla nunca, es tímido, ¿qué es lo que le supera y le impide expresarse? Antes que el ladrón llegue, lee los signos: antes de que sea demasiado tarde y te lamentes de no haber pensado con antelación. Eres sacerdote y te has aislado. No participas en nada, no haces nada para conocerte interiormente, para sentir la fuerza que llevas dentro, la vitalidad e intensidad de tu ministerio: has optado por no preguntarte nada, por evitar el silencio que te coloca ante tu realidad, por no dejar espacio a las situaciones imprevisibles. Y un día te lamentarás diciendo que estás vacío y no experimentas nada. En cambio estabas rodeado de señales que no quisiste leer y ahora te parece que es demasiado tarde. Muchos que dicen haber desaprovechado su vida y que afirman estar en una depresión o ser víctimas de la ansiedad, no han hecho nada por reciclar y revisar su vida para recuperar los ideales de juventud. Vigila y cuídate, no te dejes engañar, escúchate en el hondón del alma, lo que al inicio parece un copo de nieve puede convertirse en un alud que lo destruya todo.

Hoy empieza el Adviento. En la antigua Roma era la entrada de la divinidad en el templo a ella dedicada. El adviento cristiano es el periodo que nos lleva a la Navidad.

Adviento es velar para no perder nuestra verdad: yo soy hijo del Sol y de la Luz. El Adviento es no renunciar a la propia dignidad: yo soy Hijo de Dios. El Adviento es la toma de conciencia del Dios que vive en mí, en mi alma. Es un periodo de cambio, de luz, para que el capullo, a través del proceso de transformación de la crisálida, despierte en nosotros la conciencia de ser mariposas destinadas a volar. Y no se dieron cuenta de nada: eran hijos de Dios y no lo vieron.

Semana del 28 de noviembre al 4 de diciembre

 


Dena

Intenciones de las Eucaristías. Durante la semana a las 20:00 horas.

Lunes: Por José Argibay Valladares y esposa.

Martes: Comienza la novena a la Inmaculada Concepción de María. Sobre las 19:45 Rosario, Novena y Misa por los participantes.

Miércoles: Obligaciones del Celebrante.

Jueves: Por Esperanza Esperón Camiña.

Viernes: Por las intenciones de la parroquia.

Sábado: Por Rosa Santiago Barros y difuntos de la familia.

Domingo: Primera a las 9:00 por Isabel Martínez Acuña, Lolita Camaño y difuntos de la familia; Aurora Insua Camaño. Segunda a las 12:30 por Diamar Domínguez Varela, esposo Manuel; Juan Pérez, esposa Parisina, hija Maruja y yerno Pepe. Margarita Garrido Limeres, esposo e hijo; Elvira Touriño y esposo.

 

Villalonga

Intenciones de las Eucaristías. Durante la semana a las 19:00 horas.

Viernes: A las 17:00 primer Aniversario de Carmen Domínguez Portela.

Sábado: A las 10:30 primer Aniversario de Mercedes Souto Méndez. A las 19:00 Misa por Ana Sampedro Magdalena; Wenceslao Méndez Muñiz y esposa María Torres Méndez, de Lagarey, Elisa Buezas Bouzada, esposo Antonio, hijas María del Carmen y Elvira.

Domingo: Primera a las 10:30 por la Parroquia.

domingo, 20 de noviembre de 2022

Cristo hace las cosas con prisa: Imperdonable

 



Decimos «hacer las cosas con prisa» o apresuradamente. Cuando por medio está Cristo, parecería desoír aquella antigua certeza que se nos enseñó en la catequesis parroquial: Dios tiene mucha paciencia. Muchas veces se nos exhorta a no hacer las cosas con prisa porque, al menos así nos lo han enseñado, la prisa es mala consejera. Pero, ¿y si es Dios el que hace las cosas con prisa? Entonces las cosas cambiarían drásticamente, porque que Dios haga las cosas a todo correr puede causar una gran confusión a la humanidad. Ciertamente no hemos calculado que a veces Dios hace las cosas apresuradamente, alocadamente, permitidme la expresión. Sería sacar a Dios de la trama de lo previsible, anticipar unas cuentas que no cuadran. Pero ciertas cosas de Dios hechas apresuradamente no son por casualidad ni improvisaciones: son sólo acelerones embarazosos respecto a la velocidad de los razonamientos del hombre.

Había un usurero, su nombre era Zacheo: aquel día Dios hizo las cosas apresuradamente. «Baja a prisa, hoy debo hospedarme en tu casa». Mucho antes había una mujer de nombre María, anticipo de miles de caminantes, ella también hizo las cosas con prisa: se puso en camino y viajó con prisa a casa de su prima Isabel. O como Pedro y la tripulación de pescadores: aquella vez fueron ellos, segregados con una mirada, a hacer las cosas con prisa: «en seguida, dejadas las redes y las barcas lo siguieron». Acelerones en el sentido más genuino de la expresión, que pertenecen a la jerga de los enamorados.

El evangelio es la celebración de la paciencia: ciertas páginas sin embargo, trasmiten una prisa que incomoda, que incluso provoca angustia y rubor. Es la prisa de Dios: hay una urgencia y las cosas se hacen rápidamente, incluso a riesgo de provocar un desgarro en el grupo que lo sigue. «Hoy estarás conmigo en el Paraíso»: el imperdonable acelerón de Dios. Para que pasen Zaqueo y la Magdalena, Leví Mateo y Simón Pedro. Para que pasen también la adúltera y la samaritana pluricasada. Pero lo de hoy es demasiado: aquel ladrón empedernido no merece el Paraíso. Aquella prisa divina de cogerlo del brazo y acompañarlo a la inauguración del Paraíso, no tenía razón de ser: fue el acelerón nunca perdonado a Cristo. Dimas, el primer santo de la historia canonizado por Cristo apresuradamente: una página del Evangelio escrita alocadamente. La prisa de aquel Viernes por la tarde fue sinónimo de Amor. En agradecimiento por haber recibido la más luminosa de las adoraciones de aquel sinvergüenza empedernido que estaba muriendo junto a Él. Nada de auto–conmiseración, nada de gimoteos, tanto menos adulaciones. Simplemente una mirada y una confidencia: «Jesús, acuérdate de mí cuando llegues a tu Reino». Como si dijese: «Tú sí que eres inocente. Y además eres Rey, mi Rey». Palabras que encienden la prisa en el corazón del Crucificado: «Hoy estarás conmigo en el Paraíso»


Es la prisa del Amor, que no deja escapar la ocasión, que se infiltra por la rendija desde hace tiempo atisbada, que arranca la gracia a la desgracia, que reescribe los déficits de una entera vida, por aquella admisión de culpa y de realeza. Cristo tiene paciencia: porque ciertas existencias para ser consolidadas, necesitan largos periodos de asentamiento y reeducación. Sin embargo a veces Cristo tiene prisa: cuando el hombre está ante las fauces del mal, basta una mirada y Cristo se apresura. Que no significa hacer las cosas ni de pasada ni por casualidad, sino hacerlas con la mirada del Amor: que consigue leer allí donde la mirada del hombre no lo consigue. En aquel abismo de la conciencia donde está impreso de manera patente el Evangelio: el abismo que invoca al Abismo. Un día el Señor dijo: «los pecadores y las prostitutas os precederán en el Reino de los Cielos. Lo explicó con los gestos de la paciencia, pero el hombre no comprendió. Un día obró con prisa: y abrió el Paraíso con el menos cotizado de los hombres. Un perfecto hombre de periferia. Regnavit a ligno Deus! Aquel día Dios reinó desde la Cruz.

Semana del 21 al 27 de noviembre.

 Dena

Intenciones de las Eucaristías. Durante la semana a las 20:00 horas.

Lunes: Por Modesto Outón; Nélida Blanco Dopazo; José Castro Minguillo y difuntos de la familia.

Martes: Por José María Blanco Velázquez.

Miércoles: No habrá Misa.

Jueves: Por las Vocaciones a la Vida Sacerdotal, religiosa y misionera. A las 20:30 Reunión de catequistas.

Viernes: A las 18:00 primer Aniversario de Carmen Moldes Morgade. A las 20:00 Misa por Maruja Durán Fernández.

Sábado: A las 11:30 primer Aniversario de José María Blanco Velázquez. A las 20:00 Misa por Carmen Zamar Rodríguez; Paco Cacabelos Vidal; Clotilde Casal Rey y esposo Avelino; Antonio Bouzada Poceiro y esposa Pastora; Cándida Pérez Vilar y esposo Manuel Outón.

Domingo: Primera a las 9:00 por la Parroquia. Segunda a las 12:30 por las obligaciones del Celebrante.

 

Villalonga

Intenciones de las Eucaristías. Durante la semana a las 19:00 horas.

Martes: Por la Parroquia.

Sábado: A las 10:30 primer Aniversario de Carmen a Marquesa. A las 19:00 Misa por Manuel Lores Padín y difuntos de la familia. Difuntos de casa do Novello.

Domingo: Primera a las 10:30 por Manuel Salgueiro Álvarez y difuntos de la familia. Elisa Martínez Torres; Cándido Carballa y difuntos de la familia. Segunda a las 11:30 por la Parroquia.